Editorial 9 de diciembre
Janucá: una luz que no se apaga
“Encendiendo la luz de la esperanza: la Janucá reúne a las familias judías en una celebración de fe, libertad y milagros”.
Pr: César Echezuría
Durante ocho noches, el pueblo judío conmemora la Fiesta de las Luces, símbolo de fe, resistencia espiritual y esperanza en medio de la oscuridad. Este año, su significado resuena con más fuerza que nunca.
La historia de un milagro
Del 14 al 22 de diciembre de 2025, el pueblo judío en todo el mundo celebrará
Janucá, la Fiesta de las Luces. Durante ocho noches, las familias encenderán la
janukiá para conmemorar un milagro de hace más de dos mil años: el
aceite consagrado que debía durar solo un día, mantuvo viva la llama del Templo
durante ocho días. Un hecho que se convirtió en símbolo de la fidelidad de
Dios, y de la determinación de un pueblo por mantener viva su identidad.
Fe que ilumina en tiempos de oscuridad
Pero Janucá no solo recuerda un episodio histórico. Es, ante todo, una
celebración profundamente espiritual, que honra la luz que no se apaga, incluso
en medio de las mayores adversidades. Hoy, cuando tantas comunidades judías
viven momentos de tensión, inseguridad o discriminación, encender las velas de
Janucá es más que un rito: es una afirmación de esperanza, de dignidad, y de fe
en el porvenir.
Relevancia para el pueblo cristiano:
Como creyentes, nos une la certeza de que la luz vence a las tinieblas. Por
eso, acompañamos a nuestros hermanos mayores en la fe, el pueblo judío, en esta
celebración sagrada. Que la luz de Janucá nos inspire también a nosotros a
renovar nuestra fe, nuestra solidaridad y nuestra vocación de paz.
